La Policía invade nuestro terreno

por Comunidad de Paz de San José de Apartadó
4 de abril de 2005

La Comunidad de Paz de San José de Apartadó sigue dejando constancia de los atropellos e infamias a los que estamos siendo sometidos por el Gobierno, a través de la Fuerza Pública. Más de 300 personas de la comunidad llevamos ya tres días desplazados en nuestra finca La Holandita a 15 minutos a pie de San José en la carretera hacia Apartadó.

El día 2 de abril llegó a San José gran cantidad de policía, con varias personas de civil, se ubicaron en el predio de Nubar Tuberquia y entraron a su casa que estaba cerrada.

Inmediatamente comenzaron a construir en su predio; por las emisoras locales han anunciado que el señor Nubar Tuberquia les vendió su propiedad, pero esto es totalmente falso: Nubar no ha vendido y tiene su escritura de compraventa autenticada que lo acredita como propietario. Esto prueba que el Gobierno ha comenzado a quitarnos nuestras casas y sabemos que lo mismo pasará con el resto de ellas.

Hemos pedido igualmente la presencia de la Defensoría Regional para verificar esta situación pero aún no se ha hecho presente. Como comunidad exigimos a organismos de control como Procuraduría y Defensoría que eviten este atropello de la Fuerza Pública.

Pedimos la solidaridad nacional e internacional para que cesen las acciones de terror, de intimidación por parte de la Fuerza Pública y para que el plan de extermino contra nuestra comunidad se detenga. Nuestra voluntad de mantenernos en nuestros principios sigue intacta. Pero no sabemos cuánto podamos resistir frente a esa maquinaria de muerte y destrucción que el Gobierno ha decretado contra nosotros. Para nosotros es claro que no retrocederemos así nos acaben con judicializaciones, muertes, bloqueos o saqueos.

Hemos recibido la solidaridad de varias comunidades en resistencia civil de nuestro país. Hicimos solicitud de la presencia solidaria de la guardia indígena del departamento del Cauca como un cordón humano de protección; ellos en su generosidad de resistencia civil de 500 años han aceptado y la próxima semana estarán llegando a San Josecito, Lugar de Dignidad, así llamado el lugar donde está el asentamiento de miembros desplazados de nuestra comunidad.

En estas críticas circunstancias que vivimos, manifestamos nuestra solidaridad a la comunidad de Jiguamiandó y a Justicia y Paz en estos momentos difíciles en los que han sido desaparecidos cinco de sus miembros por parte de actores armados.

Sabemos que sin la solidaridad de mucha gente a nivel nacional e internacional no lograremos resistir, por ello agradecemos todo ese apoyo en estos momentos. Seguiremos resistiendo porque creemos en el derecho universal a no estar involucrados con ningún actor armado pese a la declaratoria de guerra, muerte y destrucción del actual gobierno a las experiencias de resistencia civil.

www.cdpsanjose.org

 
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