Asociación Campesina del Catatumbo
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Más señalamientos contra los dirigentes de la Asociación Campesina del Catatumbo
Asociación Campesina del Catatumbo - Ascamcat / Miércoles 20 de marzo de 2013
 

El pasado 16 de Marzo A las 2:45 pm. en la finca donde se encuentra el proyecto de búfalos que la Asociación Campesina del Catatumbo - ASCAMCAT gestiona conjuntamente con la Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra - ACVC, con financiación del PNUD, se produjo un nuevo incidente de seguridad con la Fuerza Pública.

En la vereda La Cristalina corregimiento del Aserrío, municipio de Teorama, el ejército se encuentra acantonado en una finca de propiedad privada desde donde operan y hacen tareas de control y combate contra la insurgencia pero también contra el campesinado y la población civil.

Soldados de la Fuerza de Tarea Conjunta Vulcano bajaron de la loma donde tienen ubicado su campamento pidiendo que les dieran queso y leche de los que se producen en la finca bufalera. Los campesinos informaron a la tropa de que el queso no se regala sino que se vende y que, por supuesto, se les vendería si acudían a la cocina.

En ese momento, uno de los soldados que tenía su identificación oculta bajo un chaleco, y que además se negó a identificarse “por seguridad”, comenzó un interrogatorio ilegal a los diferentes campesinos que se encontraban en ese momento en la finca, entre los que se encontraba Guillermo Antonio Quintero y Jhony Abril Salcedo, líderes y miembro de la junta directiva de la Asociación Campesina del Catatumbo.

Durante el interrogatorio el soldado dijo querer saber dónde estaba Jesús Antonio Quintero dueño de la finca donde se lleva a cabo el proyecto bufalero, padre de varios miembros de la junta y la Asociación Campesina del Catatumbo que, además, ha sido víctima de varios montajes judiciales y amenazas por parte de la Fuerza Pública, situación que le ha llevado verse obligado al desplazamiento forzado, a quien se refirió como “alias el Paisa”.

El soldado exigió de manera desagradable que les dijeran dónde estaban los guerrilleros. Los campesinos les respondieron diciendo que ignoraban donde se encuentra la guerrilla ya que ellos no tienen nada que ver con esas organizaciones armadas ni con cualquier otra. En ese momento el soldado agarrando su arma larga con una sola mano y apuntando a Guillermo Antonio Quintero le dijo “¿Usted sí me va a decir dónde están los guerrilleros? El líder campesino exigió respeto y les recordó que esa es una propiedad privada.

El soldado continuó haciendo señalamientos contra la población civil manifestando “que ustedes nos miran feo y se dedican a alcahuetear a la guerrilla y hacer lo que ellos quieren”. Los campesinos respondieron que ellos tenían precauciones con el ejército debido al gran historial de violaciones al Derecho Internacional Humanitario y los Derechos Humanos y porque ha sido comprobado, por instancias judiciales, que el ejército facilitó y colaboró con los paramilitares incluso ante masacres, asesinatos y tortura. El soldado continuó haciendo señalamientos y vinculando al campesinado, en general, con la insurgencia.

Como ya informamos, la Fuerza Pública también hostigó a los compañeros Guillermo Antonio Quintero y Jhony Abril Salcedo en el municipio de Convención, el pasado jueves 14 de marzo de manera irregular.

Exigimos al ejército nacional que se ajuste a la legalidad constitucional y la legislación internacional y convenios internacionales que regulan la actuación de esos cuerpos, en situaciones de conflicto armado. Solicitamos, también, al ministerio de defensa y al estado colombiano, que deje de estigmatizar y señalar al campesinado del Catatumbo como integrantes de los diferentes grupos insurgentes y que respete el trabajo de las organizaciones campesinas que trabajamos en favor de los Derechos Humanos.

Solicitamos, del mismo modo, a la comunidad internacional que esté atenta a nuestra situación de seguridad y que traslade sus preocupaciones al estado colombiano exigiendo que se garantice nuestra seguridad, por parte de todos los actores armados que operan en el Catatumbo.