Hoy continuamos el legado de la lucha campesina de los hombres y mujeres, que a lo largo ancho del país han dedicado sus vidas al cuidado y defensa del territorio, Hoy se constituye un momento histórico del Campesinado, es necesario reconocer la energía y el impulso del Paro Nacional Agrario y Popular, y la imperiosa misión que se nos entrega, construir un proceso amplio y democrático, que vincule a las gentes del común, el campesinado en general, con un proceso nacional, que contribuya a generar las estrategias, las acciones y sobre todo las propuestas que resuelvan las diferentes problemáticas y necesidades del agro colombiano, en la urgencia de construir iniciativas políticas que den solución a la crisis estructural que afrontamos en Colombia. Así mismo, es imperioso fortalecer las relaciones con los sectores populares urbanos, que nos permita avanzar en procesos de reconocimiento político, social, cultural de los campesinos y campesinas que cultivamos y cosechamos vida y la memoria del campo Colombiano.

La movilización continua con la realización permanente de asambleas municipales, asambleas sectoriales y constituyentes agrarias veredales y municipales, el fortalecimiento de la Coordinadora Social y Popular del Centro Colombiano (COSOPOC), con las propuestas de Unidad y la Articulación de acciones con los mas diversos procesos organizativos, donde han sido determinante la unidad de los procesos del congreso de los pueblos y marcha patriótica, la participación de las gentes del común que se despertaron ante el fragor del Paro agrario y popular. Insistimos en las denuncias frente a la estigmatización, persecución y señalamiento de lxs participantes del proceso, debemos también hacer memoria sobre el uso desmedido de la fuerza y el asesinato de nuestro compañero Juan Camilo Acosta, se exige celeridad en el proceso de investigación y sanción de los responsables, nos sumamos a la campaña “Yo te nombró Libertad”, por la libertad nuestro compañero vocero Nacional de la MIA Húber Ballesteros, y exigimos la pronta libertad de los presos políticos que aun se mantienen detenidos.

Así mismo, en el área rural del distrito, se avanzó en la Asamblea Campesina de Bogotá donde se refle-accionó y se construyeron propuestas, que formularon soluciones desde nuestros pensares, nuestros sentires, nuestras voces, con nuestras manos que contienen la experiencia para recrear y proteger la vida de la humanidad, entorno a; Economía Campesina, Territorio y ambiente, infraestructura y equipamientos derechos colectivos salud y educación y participación y organización; que se entregará en mandato popular de la asamblea campesina de Bogotá y será el documento base del diálogo y la negociación con la alcaldía mayor y las entidades del nivel nacional.

Se debe reconocer el carácter y alcance de este espacio en tanto ha permitido avanzar como un proceso de encuentro, de dialogo, de formación, de un ejercicio de política real con las comunidades campesinas de Bogotá, de cara a la construcción de propuestas alternativas al modelo económico, político y social, de “prosperidad” de unas pocas familias, que hoy despoja y profana nuestros territorios, saberes y culturas y sentó las bases y dio inicio a la Coordinadora Campesina de Bogotá.

Así mismo, desde los diferentes espacios, expresamos es necesario avanzar en la construcción de la Gran cumbre Nacional Agraria y Popular teniendo en cuenta que la movilización no es algo que haya terminado, es un proceso que esta en curso, como determinante del ejercicio de soberanía popular, que siente las bases para el camino de construcción colectiva, que contribuya a la unidad en la acción de las diversas organizaciones que confluimos en este espacio

Por lo tanto, buscamos construir el proceso de resistencia y movilización social para recoger y articular los acumulados de lucha, anhelos y clamor, de transformación social del pueblo colombiano, para traducirlos en una propuesta alternativa. Así también buscamos elaborar a partir de políticas democráticas y populares formuladas en mandatos o leyes, que sienten las bases de construcción de un nuevo pacto social por la paz y la vida digna, que recojan los deseos, sueños y anhelos de paz con justicia social de las colombianas y colombianos de a pie, de la cuadra, el barrio, el pueblo, municipio, vereda, corregimiento, región, gremio, convite, sector y/o proceso organizativo.

Es por eso que hacemos un llamado a todos los campesinos y campesinas, indígenas y afro descendientes de Colombia, organizaciones agrarias y populares, como también al conjunto de la población colombiana, a que nos juntemos en la Gran Cumbre Nacional agraria y popular con la participación masiva de los diversos sectores populares y sociales, que permitan construir las propuestas, soluciones que darán respuesta al conflicto agrario y social que vivimos. Invitamos a construir nuestra iniciativa de Paz con Justicia Social y vida digna.