Barrancabermeja ha sido fundada a raíz de migraciones por causa de la violencia y las generadas por el proceso de explotación petrolera. Hecho histórico que ha generado todo tipo de economía informal como forma de sustento de las familias habitantes en este terruño. Este proceso ha sido acompañado de la negligencia e incapacidad de las administraciones para dar solución a las diferentes crisis sociales. Ejemplo de esto es la actual crisis ocasionada por el desempleo ocasionado por la crisis del petróleo y la falta de oportunidades en la ciudad, también la ocasionada por el cierre del vertedero de basuras anchicaya, por contaminar fuentes hídricas entre ellas la ciénaga San Silvestre de donde se recoge el agua para el consumo humano de la ciudad. Apenas se cumplen tres días sin el servicio de recolección de basuras y la ciudad ya es un basurero.

En la ciudad de Barrancabermeja, con la entrada en vigencia del acuerdo municipal N° 015 del 2007 se inician una serie de medidas para la recuperación del espacio público, entre ellas la adecuación del centro comercial popular para la reubicación de los comerciantes informales que históricamente habían desarrollado sus actividades de mercado en la zona comercial de la ciudad. Con estas acciones, la administración municipal creyó que había solucionado la situación de ocupación del espacio público por parte de vendedores informales. En inicio se logró recuperar por poco tiempo el espacio público del sector comercial pero pronto volvería a ser ocupado a causa del desempleo y la llegada de desplazados a la ciudad que a cualquier precio tendrían que conseguir el sustento de sus familias. Estos nuevos desempleados vieron en el comercio informal la única alternativa para sobrevivir.

La administración, sin ver más allá de los propios intereses de los políticos y comerciantes de la ciudad, inicia una serie de medidas represivas para volver a recuperar el espacio público. Situación que genera todo tipo de medidas represivas en contra de los vendedores informales, tales como la orden impartida por el secretario de gobierno Roger Sanabria a los funcionarios de espacio público de portar instrumentos de uso privativo de la policía antidisturbios tales como macanas (bolillos) y escudos que usaron para agredir a los vendedores. También se ha militarizado la ciudad y las 24 horas del día permanecen unidades del escuadrón antidisturbios de la policía nacional en el sector comercial. Personal que está presto para reprimir cualquier tipo de protesta de los vendedores ante los atropellos cometidos por parte de la policía y los funcionaria de espacio público. Todo esto justificado detrás del principio constitucional de que el interés común prima sobre el interés particular. ¿Dónde queda el derecho al trabajo y al mínimo vital?, o ¿acaso no es de interés común el empleo digno y la estabilidad económica de las familias?, o ¿no dice nuestra constitución que la familia es el núcleo de la sociedad y que los niños son el futuro de la patria?. ¿Qué familia puede permanecer articulada sin el derecho al trabajo y a muchos otros necesarios para la vida digna, y que futuro va a tener nuestra patria si nuestros niños mueren de hambre?

Este no es el único problema que aqueja nuestra ciudad. Como lo había mencionado antes, el problema de las basuras es una grave situación que amenaza con prolongarse por mucho tiempo. Bueno, en este caso el directo responsable del problema es la administración municipal, pues a los barranqueños nos cobran un impuesto por el servicio de recolección de basuras y no se nos está prestando a tiempo y de calidad, además porque nos están contaminando con nuestros propios desechos.

Bueno, hagamos una relación de situaciones. A los vendedores ambulantes se les persigue como a delincuentes por ocupar el espacio público para conseguir el sustento de sus familias ¿Porqué no se le persigue a los responsables de la recolección de basuras de la misma forma por invasión del espacio público con los desechos sólidos que no han recogido? Si el acuerdo municipal número 015 del 2007, en el capítulo primero de las disposiciones generales, artículo 2 numeral 3 en lo que concierne a la ocupación indebida del espacio público reza lo siguiente: su ocupación por disposición de residuos sólidos, desechos y escombros. Y en el numeral 5 reza así: su ocupación por cualquier medio que obstruya la libre movilidad peatonal o vehicular. ¡Ah! se me olvidaba que los responsables de este problema y de esta ocupación indebida del espacio público son los mismos que persiguen a los vendedores ambulantes.

Yo creo que esta situación es mucho más grave que un ciudadano buscando el sustento de su familia en un andén del sector comercial, pues este problema aparte de ocupar el espacio público y ser anti estético para la ciudad, genera un problema de salud pública a causa de la contaminación por malos olores y plagas que surgen a causa de las basuras. O ¿es que en este caso no aplica el principio constitucional del interés común sobre el interés particular?, ¿o la salud pública no es de interés, no es un tema de interés común?, o ¿toda la ciudad somos el interés particular y la administración el interés común?

Yo invito a la ciudadanía de Barrancabermeja a reflexionar sobre estos aspectos y a que exijamos soluciones reales a los problemas sociales, económicos y políticos de la ciudad. También invito a que nos solidaricemos con los barranqueños que tienen que subsistir del transporte y el comercio informal, a que los acompañemos en sus luchas y reivindicaciones, entre todos podemos construir una Barrancabermeja en paz e incluyente.