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Manifestaciones masivas en EEUU contra Trump
La vida no es color de rosa en el imperio del norte
Agencia Prensa Rural / Lunes 14 de noviembre de 2016
 

Tras los reñidos resultados del pasado martes 8 de noviembre que dejaron como nuevo presidente de Estados Unidos al multimillonario Donald Trump, se han presentado múltiples manifestaciones de rechazo a lo largo y ancho del país norteamericano. Las calles de las principales ciudades han sido el escenario para las protestas contra los resultados electorales, contra el sistema en sí para elegir de manera indirecta al presidente y contra las políticas que se vienen aplicando -especialmente en el tema migratorio- y que se cree se agudizarán con el regreso del Partido Republicano a la Casa Blanca.

De manera espontánea (parecido a lo que se vivió en Colombia hace un mes tras los sorpresivos resultados en el plebiscito con el que se buscaba refrendar los diálogos de La Habana) miles de estadounidenses se han tomado las calles para mostrarle al mundo que no están de acuerdo con el racismo, la xenofobia, el machismo y el belicismo que Trump representa. Pese a quien algunas de las manifestaciones pacíficas han resultado en enfrentamientos con las fuerzas policiales, el mensaje de unidad entre diferentes culturas -con costumbres, creencias, atuendos y lenguajes diversos- prevalece.

A cualquiera se le erizaría la piel escuchando a miles de hombres, mujeres, niños, ancianos, personas en situación de discapacidad, miembros de la comunidad LGTBI, musulmanes, afros, judíos, latinoamericanos, y un largo etcétera: todos gritando a una sola voz "people united / will never be defeated" (El pueblo unido/ jamás será vencido). Con carteles, máscaras e instrumentos musicales improvisados, personas de todas las clases sociales le gritan al mundo que están cansados de que los altos impuestos que pagan sean destinados a guerras absurdas. Enfrentamientos que se viven al otro lado del mundo en los que mueren diariamente jóvenes soldados defendiendo los intereses económicos de bancos y multinacionales mientras bombardean instalaciones civiles y militares por igual, supuestamente en defensa de la democracia.

Banderas de varios países se vieron durante el recorrido de las marchas en las grandes ciudades, pero la más recurrente fue la de México. Muchos de los jóvenes de las nuevas generaciones de inmigrantes que nacieron en Estados Unidos miran con preocupación el futuro que les espera a sus padres y demás familiares, pues no sólo se ve venir una creciente arremetida de redadas para deportar indocumentados, sino también el aumento del odio segregacionista en contra de los latinoamericanos y particularmente contra la cultura mexicana.

Aunque muchos de los manifestantes votaron por Hillary -y tal vez no habría mayores cambios entre las políticas guerreristas de un candidato u otro-, se sienten defraudados ya que una vez más los republicanos llegan al poder sin alcanzar la mayoría de los votos gracias al sistema de colegio electoral. La frustración frente al sistema crece día a día, también el descontento contra los medios de comunicación está latente. Días atrás los grandes conglomerados de medios masivos de comunicación mostraban en las encuestas como segura ganadora a Clinton y presentaban a famosos actores y deportistas invitando a votar por la candidata demócrata. Hoy esos mismos medios se encuentran en el ojo del huracán, las personas están cansadas de sus mentiras y exigen que se visibilice el descontento del pueblo estadounidense frente a quien será su nuevo gobernante posiblemente por los próximos cuatro años (¿quién sabe si después de todo esto pudiera incluso llegar a ser reelegido para otro período?)

Galería fotográfica completa sobre las manifestaciones