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¡Es la hora de la unidad para construir la paz!
Declaración política de la Junta Nacional de la Unión Patriótica
Unión Patriótica / Sábado 11 de marzo de 2017
 

Bogotá, marzo 4 de 2017

Con dedicación y elevado compromiso la Junta Patriótica Nacional discutió y definió durante los días 3 y 4 de marzo sus compromisos principales relacionados con temas cruciales que marcan la situación política nacional y el papel que le corresponde cumplir a la Unión Patriótica de cara a su VI Congreso Nacional, fiel a su legado fundacional de lucha por la paz con justicia social, apertura democrática y un nuevo gobierno de convergencia y reconciliación nacional.

En primer lugar, la Junta Nacional reafirmó la importancia y el significado histórico del acuerdo de paz suscrito entre las FARC-EP y el Gobierno de Juan Manuel Santos en representación del Estado colombiano. Sus contenidos, sobre los cuales es necesario redoblar a todos los niveles su difusión y estudio entre la población, representan una victoria popular y un paso adelante en la lucha por las transformaciones democráticas, a las cuales esperamos se sumen también futuros acuerdos con ELN y el EPL hacia el objetivo superior de una paz completa.

Las imágenes de miles de guerrilleros honrando su palabra en la última marcha hacia las Zonas Veredales Temporales de Normalización ilustran el comienzo de un nuevo tiempo en la vida nacional y una transición política, que no solo exige el cumplimiento total del Estado colombiano con lo acordado, sino también del más amplio proceso de apoyo y acompañamiento de las comunidades a nivel nacional e internacional.

Ante el odio y el veneno de los enemigos de la paz y el fin de la guerra, la UP llama a sus afiliados y simpatizantes a liderar y contribuir en un gran abrazo de apoyo político, social y material al proceso de implementación del acuerdo de paz; en lo inmediato, con el acompañamiento y respaldo a las Zonas Temporales y a las comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas en los territorios que por décadas han tenido que padecer los sufrimientos de la confrontación y hoy quieren creer que la paz y los cambios son posibles.

Reclamamos del Estado y sus gobernantes la lealtad y el cumplimiento con lo acordado, en especial la garantía a la vida y la efectividad de las medidas contempladas para el desmonte total del paramilitarismo ante las denuncias crecientes que evidencian sus nuevas agresiones en zonas como Urabá, Chocó, Cauca y el Catatumbo.

En esta misma dirección, es digno de todo respaldo la labor de los voceros y voceras de Voces de Paz, y los demás partidos y movimientos políticos con presencia en el Congreso, que están comprometidos en garantizar, en el marco del procedimiento fast track, la incorporación de los acuerdos al ordenamiento constitucional y legal vigente.

Actos legislativos y leyes como las de amnistía e indulto, jurisdicción especial para la paz, reincorporación de las FARC y creación del nuevo partido, estatuto de la oposición, reforma electoral, garantías para la participación de movimientos sociales, plan marco de implementación, entre otros actos jurídicos que no dependen solo del Legislativo, sino también del presidente y sus ministros, constituyen la esencia misma para que los acuerdos no queden en el papel y se abra camino su implementación real, mediante nuevas instituciones, planes, programas, proyectos y presupuestos que lleguen a los territorios y a los ciudadanos.

En segundo lugar, con la participación de representativos voceros de organizaciones hermanas, la Junta abordó el análisis de los procesos de resistencia, articulación y perspectivas unitarias en el campo popular y democrático, en el entendido de que sin ella la implementación de los acuerdos y su potencial transformador difícilmente podrían materializarse. La UP nació como un proyecto de convergencia que fue sacrificado por la guerra sucia; es por eso que su memoria, su legado y su renacer no pueden ubicarse en una dirección diferente a contribuir en todos los campos donde sea posible a una nueva convergencia social y política capaz de derrotar las tentaciones de nuevas dispersiones, fraccionamientos y divisiones de la izquierda y el campo democrático.

Unidos en este momento histórico único, las posibilidades de avanzar se multiplican. Proponemos una batalla conjunta por las reformas políticas necesarias para garantizar las alianzas que, sobre la base de acuerdos programáticos y éticos básicos, permitan construir con liderazgos representativos y renovados, listas y candidaturas en coalición a la Cámara de Representantes, Senado y Presidencia de la República. No es momento de exclusiones y sectarismos, mucho menos de anticomunismo. Es la hora de la más amplia unidad para acabar la guerra y construir la paz. Con estas premisas la UP en todo el territorio nacional trabajará por presentar sus propuestas programáticas y sus candidaturas.

Con este mismo espíritu, la UP saluda y da la bienvenida al nuevo movimiento de las FARC-EP y manifiesta su disposición, junto a otras fuerzas democráticas y progresistas interesadas, de avanzar en el proceso de convergencia que sea necesario para hacer de la unidad del pueblo la fuerza más indestructible posible y la garantía principal para la victoria.

Nos comprometemos a contribuir también en el campo de la unidad popular mediante el apoyo a los procesos de convergencias sociales y políticas como lo son la Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y Popular, el Comando Nacional Unitario y el Frente Amplio por la Paz, entre otros espacios y procesos que propenden desde los territorios y los sectores, así como en el ámbito internacional, a articular las luchas de los trabajadores y el pueblo. En especial, haremos esfuerzos por lograr activar la mayor participación popular posible a favor del acuerdo y los procesos de dialogo en curso, mediante la realización exitosa del Congreso Nacional de Paz.

Finalmente, La Junta Nacional ratifica, hoy más que nunca, la presencia y vigencia de la Unión Patriótica en la lucha política nacional y regional, y convoca a sus afiliados y dirigentes a preparar de la manera más organizada posible su VI Congreso Nacional, a realizarse en la ciudad de Bogotá, del 22 al 24 de junio de 2017.

¡Viva la Unión Patriótica!
¡Viva el acuerdo de paz!
¡Viva la Unidad de las fuerzas alternativas y el pueblo colombiano!