Agencia Prensa Rural
Mapa del sitio
Suscríbete a servicioprensarural

Entrevistas comandantes de las FARC-EP (I):
Isabela Sanroque, Iván Merchán y Carlos Antonio Lozada
 

Luego de los varios intentos fallidos que ha vivido Colombia para lograr la paz nos encontramos ante un proceso que abre las puertas para comenzar a transformar las dinámicas sociales que han venido determinando el rumbo político del país. En este sentido, el actual proceso podría ser enunciado como el más cercano a llegar a buen término con la insurgencia armada de las FARC-EP. En dicho marco los múltiples actores sociales y políticos en los territorios han tomado protagonismo por las diversas perspectivas de construcción de paz. El pasado 9 de noviembre varios integrantes del Equipo Colombiano de Investigación en Conflicto y Paz, ECICP, nos desplazamos a la vereda el Diamante, en San Vicente del Caguán – Caqueta, con el objeto de entrevistar a varios comandantes y contribuir en el reconocimiento de todos los puntos de vista de los actores, entre estos, los de la insurgencia.

En sus relatos encontramos además de historias y vivencias personales, la lectura que hace esta organización en torno a temas de gran importancia en la coyuntura actual. Se tuvo la oportunidad de conversar acerca del proceso del desminado con el comandante Carlos Antonio Lozada, miembro del Secretariado; con el comandante Iván Merchán, comandante del Frente Yari y miembro del Estado Mayor de Bloque, sobre la coyuntura del acuerdo; mientras que con la comandante Isabella Sanroque, del Bloque Oriental, el diálogo se orientó sobre la memoria histórica del conflicto.

Invitamos a leer estas opiniones con la idea de construir un criterio propio sobre las mismas y de esta manera continuar sumando esfuerzos para intercambiar ideas y preguntas sobre los temas que a continuación se tocan, así como para generar herramientas para el análisis de la dinámica política que hoy más que nunca necesitan una presencia activa de la sociedad en general.

Entrevista No. 1

Comandante Carlos Antonio Lozada

Tema central: Desminado Humanitario

Durante la discusión sobre el punto 4 “Solución al problema de Drogas Ilícitas” del Acuerdo General para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera, se estableció que en el marco de la protección a las comunidades y la garantía del derecho a la vida y el bienestar de la población rural, el Gobierno Nacional se compromete a poner en marcha un programa de desminado y limpieza de las áreas afectadas por Minas Antipersonal (MAP) y Municiones Sin Explotar (MUSE), propósito en el que las FARC-EP también participará como parte de un compromiso mutuo del fin del conflicto.

A partir de dicho consenso se acuerda en marzo del 2015 la ejecución de un plan piloto de desminado humanitario en la vereda del Orejón, del municipio de Briceño en Antioquia y posteriormente en la vereda de Santa Helena, del municipio de Mesetas en el Meta. Los pilotajes tenían por objeto el desarrollo de acciones humanitarias de construcción de confianza entre las partes; así como la prueba de trabajo mancomunado entre la Fuerza Pública y la guerrilla de las FARC-EP en cada uno de los procedimientos operacionales rigurosos que merece la descontaminación de artefactos explosivos.

El proceso de construcción de paz requiere que la sociedad participe en cada una de las acciones que tengan que ver con la construcción territorial, entre ellos el desminado, el cual requiere de la contribución activa de la comunidad a partir de lo que se denomina como Enlace Comunitario, con el fin de posibilitar un análisis certero de riesgo y potencialidades de acuerdo a las necesidades particulares de cada territorio, una señalización acertada de las zonas contaminadas y el efectivo diseño y ejecución de planes de inversión que permita atender a las víctimas de la confrontación a través de dichos artefactos.

El Comandante Carlos Antonio Lozada es quien ha estado al frente de todo el desarrollo de la Sub comisión técnica del punto 3 “Fin del Conflicto”, acerca del Cese al Fuego y de Hostilidades Bilateral y Definitivo, y que junto con Edison Romaña y Matías Aldecoa vienen trabajando el tema del desminado con el Gobierno Nacional; por tanto la necesidad de escuchar sus opiniones en relación a las potencialidades y obstáculos que presenta la descontaminación y liberación de territorios.

ECICP: Comandante, en el marco del proceso de Paz se acordó hacer dos pilotajes para el desminado, uno en Briceño y otro en Mesetas, ¿qué ha pasado con estos pilotajes? En el entendido que la sustitución de cultivos en Briceño no se ha realizado y sobre Mesetas no se ha vuelto a informar.
C. A. L: Al respecto, primero debemos precisar que los dos proyectos piloto de descontaminación del territorio de restos explosivos son algo diferente al de sustitución voluntaria de cultivos; aunque ambos se enmarcan dentro de los denominados “gestos de desescalamiento”. En el caso de los proyectos de descontaminación del territorio de explosivos lo que podemos asegurar es que han sido exitosos, aunque no exentos de problemas; como que las obras sociales estipuladas en los mismos no se han realizado, o se han hecho con mucho retraso. Sin embargo, queremos destacar que los proyectos piloto jugaron un papel significativo en la construcción de confianza entre las partes y de ellos podemos desprender una serie de enseñanzas para la etapa de la implementación de los acuerdos, cuando la descontaminación del territorio cobrará una gran importancia.

ECICP: En el comunicado número 2, posterior al plebiscito, se dice que se mantienen las medidas humanitarias de construcción de confianza, eso quiere decir que ¿se tienen montados más pilotajes?, si no es así, ¿cuáles son las razones?

C.A.L: La idea es poder llevar a feliz término las medidas y los acuerdos humanitarios ya concertados, toda vez que varios de ellos, como por ejemplo la salida de los menores, no se ha podido cumplir cabalmente porque a cada paso nos tropezamos con los obstáculos propios de la burocracia y la falta de compromiso político por parte del gobierno, que para el público tiene un discurso respecto a este tipo de medidas pero al momento de concretarlas eso no se traduce en buena voluntad para su implementación.

ECICP: Entendemos que el desminado es un compromiso ético y político con la paz y la sociedad colombiana, ¿Cuál será la participación directa de las FARC en el desminado? ¿Se articularán con los operadores? ¿Creerán su propia organización?

C.A.L: Nosotros hemos expresado de manera oficial al gobierno nuestra voluntad de contribuir con la descontaminación de territorio de restos explosivos de guerra, para lo cual estamos considerando la constitución de una corporación que en acuerdo con otras organizaciones dedicadas a esa labor humanitaria pueda comprometerse en las distintas fases que tiene esta tarea.

ECICP: ¿Cómo ven ustedes el papel de las comunidades en todo este proceso de descontaminación de los territorios y su posterior desarrollo?

C.A.L: La experiencia de los proyectos piloto nos ha demostrado que para el éxito de este tipo de misiones es fundamental la vinculación de las comunidades en las etapas de estudio no técnico y educación en el riesgo, pero más allá de eso, consideramos que lo verdaderamente importante es que esos proyectos lleguen de la mano con desarrollo socio-económico para los territorios; algo que implica la construcción de infraestructura social, carreteras, puentes, escuelas, puestos de salud, etc., pero también que sea la oportunidad para que el Estado haga presencia con la implementación de los acuerdos a través de la Reforma Rural Integral, mediante la entrega de tierras, su titulación, créditos, planes de sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito, entre otros beneficios que deben recibir las comunidades que históricamente han habitado estos territorios donde se ha desarrollado el conflicto. Parar lograr todo esto lo determinante será la organización y la movilización de las comunidades; como lo ha demostrado la experiencia.

ECICP: ¿Qué les parece la certeza que después de haber liberado los territorios no se desarrollen de acuerdo a los intereses productivos comunitarios? Por ejemplo la llegada de megaproyectos.

C.A.L: Aquí también debemos echar mano de la experiencia reciente, que nos demuestra que cuando las comunidades asumen la responsabilidad de organizarse y movilizarse por la defensa del territorio, de las riquezas naturales, del medio ambiente y de la economía campesina se pueden lograr victorias importantes frente a la voracidad de las grandes compañías ligadas a los megaproyectos. Santurbán, La Colosa, El Quimbo, La Macarena, son algunos de esos ejemplos recientes. No hay fuerza mayor, en capacidad de detener esa voracidad, que la del pueblo organizado.

ECICP: ¿Cómo ven ustedes que ya se esté empezando hacer desminado sin la participación directa de las FARC?

C.A.L: Todo esfuerzo que se haga en ese sentido es bienvenido. Ahora bien, la firma de los acuerdos y el compromiso de las FARC con esa tarea en específico aporta un elemento nuevo que es fundamental, el conocimiento y la experticia de los combatientes guerrilleros hace mucho menos riesgosa esa tarea al tiempo que aumenta la eficacia y le eficiencia del trabajo de descontaminación, lo que al final debe significar un ahorro enorme de tiempo, de recursos y lo más importante, quizás, de vidas humanas.

ECICP: ¿Qué opinión les merece que existan prevenciones en algunos territorios para hacer el desminado por la posible entrada de estructuras paramilitares?

C.A.L: El conflicto colombiano es algo sumamente complejo, que se expresa de múltiples formas, el paramilitarismo es una de ellas, por eso los acuerdos debemos valorarlos en su integralidad no como compartimentos separados. En el punto 3 Fin del Conflicto se contempla una estrategia multidimensional para combatir este fenómeno; y allí el Gobierno va tener que poner a prueba su voluntad política mediante la implementación de lo acordado. En todo caso, le corresponde nuevamente al pueblo ser el garante del cumplimiento mediante una eficaz labor de fiscalización, denuncia y movilización, en caso que este u otro compromiso pactado no sea cumplido. Está también todo lo acordado en materia de verificación con la presencia de la comunidad internacional, que es algo igualmente importante.

ECICP: ¿Cómo se logrará establecer un capitulo verídico sobre la utilización de este tipo de artefactos explosivos en el Informe de la Comisión de la Verdad?, pues hay zonas en las que la fuerzas pública son quienes desminan y hay otras donde las comunidades han dado la certeza que han estado recogiendo todos estos artefactos de manera extraoficial.

C.A.L: Efectivamente esto ha venido ocurriendo. Desde el inicio del proceso el Gobierno se empeñó a fondo en construir la matriz de un único responsable del conflicto, sin embargo, hoy día ese tipo de pretensión ya no tiene cabida, sobre todo a raíz del informe de la Comisión Histórica del Conflicto y sus Víctimas, que pese a los distintos enfoques que contiene, todos son concluyentes en la existencia de una responsabilidad múltiple; en la que el Estado, por su condición misma, es el máximo responsable. Esa verdad es incontrovertible y seguramente en la medida que la Comisión de la Verdad y el Tribunal Especial, acordado en la Jurisdicción Especial para La Paz, entren a cumplir su trabajo, la verdad de todo lo ocurrido irá floreciendo.

ECICP: ¿Qué se necesita para que haya un proceso de desminado exitoso e integral?

C.A.L: Primero que todo, que el acuerdo comience la etapa de implementación. En segundo lugar, que haya un compromiso y una voluntad política por parte del Gobierno para facilitar la acreditación de distintas organizaciones dispuestas a participar en esta labor humanitaria, lo que al final debe permitir que sea el interés humanitario el que esté en el centro de los esfuerzos, de todos quienes asumimos el compromiso ético y político de reconstruir el país.

Entrevista No. 2

Comandante Iván Merchán

Tema central: Coyuntura del acuerdo de paz posterior al plebiscito

El pasado 2 de octubre se realizó el plebiscito para refrendar el acuerdo general firmado entre la insurgencia de las FARC-EP y el Gobierno Nacional, día en el cual 34.899.945 colombianos debían acercarse a hacer uso de su derecho político. El resultado final de la consulta es la estrecha victoria del NO, con un total de 53.894 votos sobre el SÍ, con una abstención total del 62%. Este escenario cambia el rumbo de las negociaciones y pausa la implementación de los acuerdos, obligando al gobierno nacional a establecer un diálogo con los sectores que abanderaron la negación del acuerdo, para posteriormente sentarse con los delegados de las FARC-EP y dirimir las nuevas propuestas.

El Comandante Olivo Merchán Gómez, alias Iván Merchán más conocido como el Loco Iván, hace parte del Estado Mayor del Bloque Oriental de las FARC-EP. Iván Merchán, oriundo del municipio de Lejanías Meta, lleva 30 años en la organización guerrillera, se ha fugado dos veces de prisión y ha sobrevivido a varios bombardeos en su contra. Su gran parecido con el extinto Jorge Briceño, más conocido como el Mono Jojoy le ocasionó en el pasado ser blanco de varias operaciones militares; en su cuerpo se encuentran varias marcas de la guerra, de la cual afirma, no pidió ser parte.

A lo largo de la conversación el comandante Iván se mostró optimista sobre el proceso, extendió la invitación al pueblo colombiano a apropiarse de los acuerdos y a exigir su cumplimiento. Aunque su lectura es favorable el temor del incumplimiento está presente con la desconfianza en la repetición del exterminio de la Unión Patriótica.

ECICP: Con los últimos acontecimientos del país como el resultado negativo del plebiscito y la confesión del gerente de una de las campañas del NO frente a las estrategias que utilizaron para engañar a los ciudadanos, ¿no les hace pensar que una futura campaña política del partido que surja de las FARC no va a ser fácil?

I.M: En medio del proceso y de todas las situaciones que se presentan se analizan muchos escenarios, nosotros somos una organización político-militar; siempre hemos hecho política. La diferencia es que ahora lo vamos a hacer dentro de la legalidad y aunque no va ser fácil, porque el Gobierno siempre ha tenido una maquinaria donde trata de oponerse y acallar las ideas de los movimientos minoritarios, nosotros lo que pensamos es convencer con la verdad, debemos estar a la altura de los retos que tenemos por delante y como organización lo vamos a hacer y lo haremos de la mano del pueblo colombiano.

ECICP: Cuando los acuerdos se empiecen a implementar, después de la reestructuración que le van a hacer por el resultado negativo del plebiscito ¿Qué expectativa tiene usted frente a la dejación de las armas?

I.M: Las armas para nosotros representan una herramienta para defendernos, nunca las consideramos el medio adecuado para entrar en política. Tuvimos que usarlas porque el Estado nos obligó a hacerlo, entonces hacer la dejación de ellas es un paso que se debe dar y se hará dentro de los términos establecidos en el acuerdo. El pueblo, el Gobierno y el Estado deben entender que debe quedar abolido el uso de las armas en política.

ECICP: ¿Usted cree que hubo exceso de confianza por parte de las FARC al realizar la X conferencia antes de la firma del acuerdo y de conocer los resultados del plebiscito?

I.M: No, nosotros siempre hemos buscado la paz y las conferencias siempre se han realizado bajo esta idea. Esta vez se hizo en medio de un ambiente de paz y se dio un respaldo unánime a los acuerdos logrados. Los documentos y conclusiones que de allí salieron facultan para seguir buscando la paz, o en dado caso si el Gobierno y el Estado nos llevan a la continuación de la guerra, que esperamos no sea así, tenemos todo dado en la Conferencia, para una cosa o para la otra.

ECICP: ¿Considera necesario realizar una nueva Conferencia para explicarle a la guerrillerada todos los cambios y ajustes que se le hagan al acuerdo?

I.M: No, no creo. En la conferencia se trazan reglas generales y ahí se hacen planes basados en la situación que se vive, entonces lo que le dije anteriormente, haya paz o si el Gobierno nos lleva a continuar en esta guerra, los documentos están dados para eso. Nosotros estamos direccionados por el Secretariado, el Estado Mayor Central, los Bloques, Frentes, Compañías, Columnas, Guerrillas y Escuadras; todo lo que va surgiendo nos lo van informando, entonces no veo conveniente una nueva Conferencia porque ya se trazaron unas líneas generales para la paz o para la guerra en caso que el Gobierno no cumpla.

ECICP: ¿Qué piensa con todo lo que viene pasando en el país?, hay una incertidumbre en la sociedad, hay temor por lo que pueda pasar, pero también hay optimismo, ¿qué decirle a la gente?

I.M: Nosotros somos conscientes que la paz no tiene retroceso, pero aquí es importante que el pueblo colombiano entienda que esto ya no depende de las FARC, ni del Gobierno, depende del empoderamiento que el pueblo haga de los acuerdos y que haga cumplir todo lo acordado, porque la gente cree que este es un acuerdo para las FARC y no es así.

Del pueblo depende que los acuerdos no queden en el papel y que se empiecen a ver las transformaciones sociales que tanto necesita el país. Entendemos que la oligarquía invierte mucho dinero en campañas mediáticas y dé desprestigio para engañar al pueblo y que por lo tanto los desafíos a los que nos enfrentamos en el campo electoral no son fáciles, pero asumiremos los retos que vengan con compromiso y altura, es aquí donde esto se empieza a poner bueno, porque tenemos que convencer, pero lo haremos con la verdad.

ECICP: Ya para finalizar, ¿qué proyecto productivo va a desarrollar luego del tránsito a la vida civil?

I.M: Los proyectos que se desarrollen son en beneficio de la comunidad. Tenemos que esperar que los acuerdos lleguen a un feliz término y dependiendo las ayudas que brinden el gobierno y la comunidad, ahí si veremos qué proyecto realizar. Yo hago parte de una organización y estoy a disposición de las orientaciones que el Secretariado y el Estado Mayor acuerden, las tareas que nos asignen son las que vamos a cumplir. Como persona no aspiramos a un cargo u otro, uno lo que piensa es en continuar en este proceso, en la lucha y contribuir en la consolidación y materialización de la paz.

Entrevista No. 3

Comandante Isabella Sanroque

Tema central: Recuperación de la memoria histórica del movimiento armado

El conflicto armado interno en Colombia, el más extenso del hemisferio occidental, ha afectado diversas poblaciones durante casi medio siglo de existencia, periodo en el cual los enfrentamientos entre los grupos insurgentes, el Estado colombiano, el narcotráfico y el paramilitarismo han generado niveles de victimización preocupantes e historias por esclarecer.

Las reclamaciones de una Colombia diferente comenzaron con las peticiones de familias campesinas que venían del Sumapaz y del oriente del Tolima buscando una vida digna desde mediados del siglo XX. Un grupo de 48 campesinos en 1964
decide organizarse en autodefensas campesinas, el entonces presidente, Guillermo León Valencia bombardea Marquetalia, población donde vivían comunidades y el grupo de insurgentes, obligando a estos grupos a movilizarse hacia el monte y comenzar a estructurar la guerra de guerrillas. Varios fueron los intentos de paz, sin embargo todos estos intentos resultaron fallidos. Esta historia del siglo XX merece un especial tratamiento con el objetivo de entender los matices que hicieron posible la configuración de las dinámicas de violencia que vive el país. Es fundamental comenzar a escuchar las historias no oficiales que no han sido contadas por las dinámicas mismas de la guerra.

ECICP: Según su visión, ¿cómo podría reconstruirse la memoria histórica de la insurgencia de las FARC?

I.S: Bueno pues, saludar al Equipo de Investigación. Lo primero que tendría que decir respecto al tema de la memoria histórica es que para nosotros por supuesto que es fundamental que toda la tradición y toda la historia que llevamos encima como organización sea conservada, porque además consideramos que la historia de Colombia en el siglo XX es impensable contarla sin la participación de lo que es las FARC; pero contar la historia real, no la historia que hasta ahora ha sido tan distorsionada y tan manoseada. Entonces esa memoria histórica nosotros consideramos que es el punto de partida para recuperar todos esos elementos que fueron causantes del conflicto de la historia en Colombia.

A partir de la implementación yo considero que en la estrategia de comunicación debe haber una serie de archivos que puedan ser visibles ante la opinión pública. Nosotros ya estamos trabajando de hecho en esa materia, en recrear y dinamizar una serie de elementos que puedan ser vistos por la sociedad, por ejemplo biografías y archivos audiovisuales; nosotros tenemos mucho material que no se conoce, todo eso inicialmente se va a pensar para una página web, ya tenemos una en redes sociales, una página, pero vamos a tener algo específico donde se retome todo el tema de nuestra memoria, eso va a ser muy importante porque en la realidad actual la gente dentro de su investigación acude a las redes.

También consideramos que en la educación debe haber cátedras específicas donde se cuente la historia real, esa va a ser también una de las luchas que vamos a dar. Tenemos la propuesta de la instalación de algunos museos en las regiones y en los territorios, instalar allí algunos elementos que tienen un significado importante para nosotros a partir de la guerra, cosas no tradicionales. También consideramos que hay que hacer que algunos cementerios o monumentos tengan un realce, es la memoria de una cantidad de gente que murió dando la vida por una causa, por su país, merecen ser recordados.

Nosotros dentro de nuestro elemento político aspiramos a que haya una cantidad de instancias a las cuales podamos acudir para precisamente reivindicar la memoria de toda esa gente que ha muerto.

ECICP: En ese sentido, y ampliando la respuesta anterior ¿Para usted cuáles serían los momentos más representativos de la historia de esta guerrilla y de su propia historia en las filas de las FARC?

I.S: Bueno, para nosotros como colectivo organizado, el tema del origen de las FARC en Marquetalia es muy simbólico. Yo creo que la historia y lo que es realmente la tradición campesina que tiene nuestra organización, en donde somos obligados a irnos al monte a coger las armas para defendernos, es la resistencia que queremos contar. También la de una cantidad de personas que fueron muy importantes en el desarrollo de este proceso en Colombia, entre esos lógicamente pues sería inevitable no mencionar al camarada Manuel, al camarada Jacobo, a Alfonso y a Mariana Páez. Hay camaradas que hay que hacerles una reconstrucción de sus vidas, de sus historias, de sus trayectorias, de su paso por la revolución en Colombia.

A manera personal, yo creo que la intensidad de la guerra que implicó el Plan Patriota y el Plan Colombia es una historia que hay que contar no solamente en términos cuantitativos de cuantas bajas tuvimos o cuantas bajas tuvieron, sino hay una cantidad de crónicas dentro de la guerrillerada que hace parte de lo que fue el enfrentamiento tan terrible en medio de las bombas, en medio de los hostigamientos, en medio de los operativos; el valor que tiene la guerrillerada ante todos esos operativos militares, yo creo que eso hay que contarlo con mucha dignidad y con el valor que se merecen.

ECICP: Con respecto a esos sitios de los que de pronto ha conocido o en los que ha estado, como Marquetalia, ¿Qué otros espacios sugiere usted como lugares de memoria?

I.S: Sí, casualmente yo he tenido en mente y me parece que es como una de las deudas que tengo con la historia. Lo propuse y he reiterado mi propuesta y pienso que va a ser acogida en algún momento, el área del frente “Combatientes del Yarí”, que está entre la Macarena y San Vicente del Caguán debe ser considerada como un lugar de memoria, ahí hay una serie de sitios que fueron habitados en la época del despeje por el camarada Manuel y Jorge. Entre esos, hay una casa que le llaman “del Camarada Manuel” y queda en un sitio que es la “Ye de Los negritos”. Es una casa que ha sido saqueada por la búsqueda de guacas y que ha sido blanco de una cantidad de destrozos por parte del Ejército. Sin embargo, sigue ahí, no está en ruinas, se ha conservado de todas maneras; yo creo que esa casa merece reconstruirla y allí instalar algunos elementos que puedan contar un poco como se dio aquí la cosa.

ECICP: ¿Cuál considera o cómo considera que ha sido el aporte de la mujer al proceso histórico actual?, ¿cuál es el legado histórico que ha dejado el papel de la mujer en la memoria histórica de las FARC?

I.S: La mujer ha sido fundamental, desde sus orígenes en las FARC han habido mujeres, en menor proporción en ese momento, pero poco a poco ha venido en ascenso hasta el punto que ahorita somos el 40 %. Estamos en todas las responsabilidades; en el secretariado no, pero en el Estado Mayor sí. Además porque nosotros no lo manejamos desde las cuotas sino que lo manejamos de acuerdo a otros criterios, un poco más de la proyección y del desempeño, no significa que no hayan mujeres capaces. Retomando el tema de la memoria histórica, yo considero que hay una cantidad de mujeres que desde los roles que han venido jugando en el marco de la guerra y la política al interior de la organización han hecho aportes grandiosos, que merecen ser reconocidos. Mujeres en todas las tareas, luchadoras, valientes que han estado hombro a hombro, o sea nosotras las mujeres lo que tenemos es ganancia en dignidad, que nosotras aquí no tenemos ningún tipo de discriminación.

Considero que somos supremamente avanzados en nuestra política frente al tratamiento de las mujeres, nos faltará en la práctica superar muchas cosas. En ese orden de ideas la historia de las FARC y su memoria puede aportar a la realidad de las mujeres en la organización, esa verdad que es contraria a la que han dado en los medios de comunicación por muchos años. En la coyuntura actual, este proceso de paz es muy importante porque es sin lugar a dudas el reflejo de la participación nuestra, la demostración de que nosotras no estamos solamente cocinando y lavando la ropa de los comandantes, si no que en el proceso de paz se visibilizó una cantidad de mujeres, nos visibilizamos. Fue el escenario perfecto para decir: vea, es que las mujeres estamos en todo, plenipotenciarias, en las comunicaciones, en el relacionamiento y la subcomisión de género. Es muy importante y la historia nuestra tiene que remarcar mucho este momento.

ECICP: ¿Consideraría usted importante reivindicar toda esta memoria histórica a través de la instauración de un museo, una galería o algo por estilo?, Si decidieran hacer un museo de las FARC ¿qué le gustaría que fuera visibilizado allí?

I.S: Para retomar la pregunta anterior, yo creo que el tema de las mujeres en las FARC tiene que ser una de las cosas que nosotros contemos con mayor intensidad de cómo ha sido la participación nuestra, por qué las futuras generaciones tienen que saber que estas conquistas son el producto del pueblo colombiano; pero que en esa lucha, en esta brega de 52 años han muerto una cantidad de mujeres y hemos estado aquí aportando de igual a igual. Entonces, la verdad tienen que saberla las futuras generaciones, a nosotros no nos pueden decir que nos hicieron la revolución porque nosotras siempre hemos estado acá.

ECICP: A nivel individual ¿Cuál consideraría usted que es su aporte a la reconstrucción de la memoria histórica una vez se firmen los acuerdos?

I.S: A mí me interesa mucho el tema, personalmente yo tengo una amiga que está muy interesada en trabajar, creo que con ella vamos a diseñar algún plan para trabajar en ese sentido. Ella es licenciada en ciencias sociales, se llama Victoria, está muy interesada en el tema y yo creo que yo voy a acompañar ese proceso. Ella tiene un poquito más de especialización y de hecho quiere perfilarse para hacer alguna maestría o alguna especialización a futuro sobre el tema, entonces, sí hay que ayudar, hay que investigar, ponernos en el plan de sistematizar, bueno y de construir toda esa memoria, hay muchas cosas por contar y no se pueden quedar en el silencio, por supuesto que no.

ECICP: Ya para finalizar ¿Cómo se ve usted cuando se reincorpore a la vida civil, cuáles serían sus expectativas al salir de todo esto?

I.S: Lo de la reincorporación es una cosa como tan incierta por qué a manera personal yo siempre me veo como en reuniones, aportándole al nuevo movimiento, yo me veo es en función de hacer política, de hablar con la gente, ayudar a impulsar el desarrollo en las regiones, por qué eso he estado haciendo en un tiempo. Pero yo creo que como proyecto de vida en función de ese colectivo. Aparte de eso me imagino estudiando.

ECICP: ¿Qué le gustaría estudiar?

I.S: Yo tengo unos semestres en ciencias sociales, creo que voy a terminar esa carrera y después de pronto estudiar ecología, hacer una maestría aunque no tengo eso como muy claro todavía. Lo que sí sé es que tengo que estudiar, estudiar y prepararme porque son muchos los retos que se vienen y muchas las cosas que hay que hacer y toca estar a la altura. Además reunirme con mis familiares, poder saludarlos. A futuro, en lo próximo, no me veo casada, pero sí de pronto en alguna relación.

ECICP: Muchas gracias, para nosotros como ECICP es muy importante conocer todos estos puntos de vista, nos parece clave y fundamental conocer la historia desde quienes la vivieron.

I.S: ¡ah!… me hiciste acordar la idea que tienen las comunidades en este sitio, aquí donde estamos, la idea es que se convierta en un sendero ecoturístico porque aquí también está toda la memoria. Me parece que es muy simbólico porque acá se desarrolló la guerra, o sea, acá hubo paramilitarismo, la guerrilla estuvo acá, eso pesa. Además porque acá la guerra en el proceso ha tenido varios momentos importantes y sobre todo por el tema de la X conferencia.

ECICP: Claro, es algo simbólico para la paz, de nuevo muchas gracias.