Declaración política de la Caravana Internacional por la Vida de los Trabajadores Colombianos

8 de julio de 2004

El genocidio de los activistas populares en Colombia ha convertido el derecho a la vida en la principal exigencia de todas las organizaciones sindicales. Foto Sintraelecol.

Nosotros, hombres y mujeres, quienes hacemos parte de la Caravana Internacional por la Vida de los Trabajadores y Trabajadoras Colombianas,

Habiendo constatado,

1. Que Colombia registra el más alto índice de sindicalistas asesinados.

2. Que la magnitud de la violación sistemática y selectiva, a través de las prácticas y procesos históricos de exterminio, extendida en el tiempo e impune de los derechos a la vida, a la libertad y a la integridad de los sindicalistas y sus organizaciones en Colombia, pone de manifiesto la grave situación humanitaria de los trabajadores y las trabajadoras colombianas.

3. Que los trabajadores y las trabajadoras han luchado en medio del establecimiento de una práctica de violaciones permanentes de los derechos humanos, en un contexto general de impunidad.

4. Que frente al asesinato de sindicalistas, existe una clara tendencia a realizarlos de manera selectiva y con la doble acción de eliminar físicamente al dirigente sindical y debilitar de manera gradual la organización de los trabajadores y destruir las comunidades, aunque se argumenta por parte del gobierno nacional y el sector privado, que su muerte responde a la existencia de un conflicto armado en el país.

5. Que la desprotección de los trabajadores y trabajadoras colombianas en materia laboral y sindical, producto de la subcontratación, deslaboralización y la precarización de lasa condiciones de trabajo, es un factor más de su vulnerabilidad.

6. Que visitadas las ciudades de Arauca, Saravena, Tame, Medellín, Barranquilla, Cali, Bogotá, Barrancabermeja, Bucaramanga, y habiendo intercambiado con diversos sectores de la población entre ellos, organizaciones de afrodescendientes, mujeres, desplazados, campesinos, indígenas, estudiantes, jóvenes, obreros, se hace evidente el impacto en la población civil de las medidas contenidas en la política de seguridad democrática y de estado comunitario del gobierno nacional.

7. Que el 99% por ciento de las investigaciones por crímenes cometidos contra sindicalistas se encuentran en la total impunidad.

8. Que gran parte de la población victima de violaciones a sus derechos humanos tiene temor de denunciar, declarar y en general de acudir a las instancias judiciales por considerar que no existen garantías.

9. Que la implementación de megaproyectos, el accionar de empresas transnacionales y los avances del gobierno colombiano en las firmas de tratados de libre comercio, continúan poniendo en riesgo las precarias condiciones de la población colombiana.

Plan de acción

Por las anteriores consideraciones las diferentes delegaciones participantes en la caravana internacional por la vida de los trabajadores y trabajadoras colombianas, después de presentados los informes hemos concretado los siguientes mínimos de un plan de acción que nos permita fortalecer el trabajo que por Colombia existe en nuestros países y continuar contribuyendo a la lucha del pueblo colombiano.

-- Al regreso a nuestros países continuaremos difundiendo, sensibilizando y presentando la situación que hemos constatado desde todos los sectores sociales y regiones de Colombia. Para esto nos apoyaremos en los materiales elaborados y entregados por las organizaciones anfitrionas. Coordinaremos a través del correo electrónico para intercambiarnos el material que se tiene en los distintos países. El material final de la caravana se les enviará a las distintas delegaciones como material de trabajo.

-- Nos comprometemos a presentar ante los organismos oficiales de nuestros países la grave crisis que hemos observado en Colombia y les exigiremos que paren el apoyo al gobierno colombiano y le exijan el respeto por los derechos humanos y la reparación integral de las victimas.

-- Igualmente, coordinaremos actividades puntuales entre los distintos países aunando esfuerzos para lograr mayor incidencia en la denuncia y en los procesos de resistencia que adelantan las comunidades en Colombia.

-- Buscaremos hacer presencia en foros (Foro Social Mundial, Foro Social Europeo, Foro Social Américas) y otros espacios para visibilizar la situación del país y coordinar con otros pueblos del mundo acciones que permitan fortalecer las campañas que se adelantan contra la política de las multinacionales, del Plan Colombia y de los acuerdos de libre comercio.

-- Ante la crítica situación en que se encuentra el movimiento sindical es urgente que desde nuestros países trabajemos para que lo más pronto posible la Organización Internacional de Trabajo, defina una comisión de encuesta para Colombia, que exija el respeto de los derechos humanos de los trabajadores y trabajadoras y condene la política de impunidad ejercida desde el gobierno colombiano.

-- Los éxitos obtenidos por esta caravana, arrojan la necesidad de institucionalizar este instrumento de lucha por la vida, el cual será a partir de esta primera iniciativa una Caravana Permanente por la Defensa de la Vida y de los Derechos Humanos del Pueblo de Colombia. Si bien es cierto que esta caravana nos ha dado la oportunidad de conocer la dramática situación de los pueblos indígenas, desplazados y de otros sectores, consideramos importante que en las sucesivas caravanas acompañen más estos procesos de resistencia.

-- Apreciando la participación de movimientos de mujeres, juveniles, estudiantiles y artísticos, consideramos importante difundir estos procesos de resistencia que adelantan cada unos de estos sectores.

-- La propuesta de caravana y las acciones que adelantemos desde los distintos países del mundo, fortalecerán la lucha contra la guerra, por la vida y el bienestar de los pueblos.

-- Fortaleceremos las campañas que se adelantan contra multinacionales en Colombia (Nestlé, Coca-Cola, Drumond) y nos vincularemos a las que se proponen contra multinacionales petroleras como OXI, Repsol, BP, entre otras.

En relación con la campana mundial contra Coca-Cola acordamos:

a) Declaración del 22 de julio como Día Internacional contra la Coca-Cola, a través de acciones coordinadas por parte de las diferentes comisiones. Se propone que en esa fecha, en cada uno de los países se haga presencia en los distintos medios de comunicación.

b) Generar el debate que estimamos necesario para mejorar la Campaña. Para ello es preciso compartir los resultados de la experiencia acumulada hasta hoy. Proponemos establecer un debate a través de la red, que nos permita compartir debilidades, aciertos, fortalezas y oportunidades.

c) Compartir los materiales elaborados hasta la fecha por parte de los diferentes grupos impulsores de la campaña: exposición fotográfica, contra-publicidad, creación audiovisual... como instrumentos para concentrar materiales y abrir aportaciones.

d) Semana de acción internacional contra Coca-Cola y puesta en común de la elaboración de materiales que sirvan para alcanzar el mayor número de alianzas, analizando los motivos de la campaña contra la transnacional desde diversos prismas pero siempre con el mismo propósito: divulgar la realidad colombiana y denunciar los atropellos cometidos por las transnacionales en todo el mundo. Como en el primer punto, esa semana quedaría estructurada en torno a varias actividades llevadas a cabo en todo el mundo, nutriéndonos de los resultados perseguidos con el apartado b).

-- Impulsaremos la presencia permanente de internacionalistas en Colombia para fomentar lazos de hermandad y apoyo a las comunidades en resistencia, especialmente para las del departamento del Arauca, Atlántico, Cauca, Antioquia, entre otros.

-- Es necesario continuar el proceso de conocimiento de las multinacionales, por lo que el observatorio social de empresas multinacionales, megaproyectos y derechos humanos es el instrumento que debemos consolidar y fortalecer. Asumimos el propósito de trabajar conjuntamente con esta importante iniciativa.

-- La caravana mantendrá la comunicación y solicitud permanente ante los organismos de control y justicia que ha visitado y a los cuales la exigencia primaria es la defensa de los derechos humanos y la verdad, la justicia y la reparación integral de las victimas. Hay que exigirles que el proceso de negociación con los paramilitares no esté basado en la impunidad y el olvido de las víctimas.

-- Las personas que conformamos la Caravana, adelantaremos las acciones pertinentes tendientes a obtener justicia en los tantos crímenes cometidos contra trabajadores y trabajadoras en los últimos 18 años en Colombia, los cuales podrían configurar un cuadro de genocidio sindical.

La impunidad en Colombia respecto a crímenes de lesa humanidad es ya un lugar común, razón por la cual la caravana dará prioridad al escenario internacional de exigibilidad de justicia.

En el campo jurídico, activaremos relaciones con ONG, asociaciones de abogados y juristas en procura de que adelanten las demandas correspondientes contra el Gobierno Colombiano y contra quienes se hayan beneficiado del genocidio; haremos cabildeos con gobiernos democráticos y con sus servicios de justicia a fin de que investiguen y sancionen los responsables de estos crímenes; y, respecto a los sistemas de protección de derechos humanos interamericano y de la ONU, buscaremos su pronunciamiento a través de la presentación de casos concretos. Finalmente, elevaremos consultas a expertos a objeto de estudiar la posibilidad de llevar casos específicos o el caso de genocidio sindical ante la Corte Penal Internacional.

En el campo no jurídico, las personas que conformamos la caravana impulsaremos un mecanismo de exigibilidad de justicia, similar a un Tribunal Internacional de Opinión, que, sin perjuicio de que se ocupe de casos emblemáticos violatorios de la vida y de la dignidad humana, examine principalmente las políticas públicas de carácter económico y social que han sido rechazadas por los trabajadores y las trabajadoras e igualmente las políticas públicas y la legislación penal que permitió el genocidio sindical. Así mismo, el TIO abrirá un escrutinio a las estructuras legales y paralegales que instrumentalizaron las políticas públicas y no públicas de terror contra el movimiento sindical colombiano.

-- La caravana pudo observar que la violación de los derechos humanos no es sólo en el sector sindical sino en todos los sectores de la población pobre de Colombia, por lo que nos comprometemos a denunciar esta cruda realidad, pues creemos que existe una crisis humanitaria en el país.

-- La caravana solicita de los actores armados presentes en el conflicto colombiano, el respeto al Derecho Internacional Humanitario.

-- La caravana internacional contribuirá en la difusión del SOS por la vida de los sindicalistas colombianos, convocado por las centrales internacionales para el segundo semestre de 2004.

 
Lo agrario Conflicto Últimas Noticias Derechos humanos Plan Colombia Movimientos sociales Medio ambiente Opinión Internacional Contáctenos ¿Qué es Prensa Rural?