En la ciudad de San José de Cúcuta el día de hoy, 17 de Diciembre de 2013 aproximadamente a las 10 de la mañana, un hombre y una mujer, usando armas cortas, redujeron a la niñera de la hija de la dirigente campesina Olga Lucía Quintero. Una vez la pareja de sicarios ingresó a la vivienda, indagó por el paradero de Olga Lucía; al comprobar que no estaba, procedieron a amordazar a la niñera. El hombre procedió a subir a la segunda planta de la casa, de donde sustrajo una caja de seguridad que contenía varias “memorias extraibles - usb”, dos discos duros y un computador de propiedad del compañero de Olga Lucía, el dirigente campesino y defensor de derechos humanos, Mauricio Ramos.

Al salir de la casa, los atacantes le dijeron a la niñera amordazada que: “esa hijueputa” refiriéndose a Olga, “sabe quienes somos nosotros”.

Advertimos a la comunidad nacional e internacional que esta situación hace parte de una campaña de acoso estatal, persecución política y amedrentamiento contra los dirigentes de la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat). La cuál se constituye en una retaliación tanto por la movilización campesina de los meses de junio a agosto de este año, como por las posiciones asumidas por los voceros de los campesinos en la Mesa de Interlocución y Acuerdo (MIA) del Catatumbo, que han denunciado la intransigencia y el autoritarismo del gobierno nacional frente a los reivindicaciones del campesinado.

Solicitamos solidaridad y acompañamiento en estos momentos en los que nos encontramos severamente amenazados.

NO DEBE HABER EN COLOMBIA ESPACIO PARA QUE CONTINUE EL GENOCIDIO DEL CAMPESINADO