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David Flórez: “Gobierno sigue pensando en victoria militar”
La Junta Patriota del movimiento social y político Marcha Patriótica ya trazó los derroteros del año 2015. La movilización por la paz en primer renglón David Flórez, vocero de Marcha Patriótica.
Hernán Camacho / Viernes 6 de febrero de 2015
 
David Flórez, vocero de Marcha Patriótica.

En la primera reunión de 2015 de la Junta Patriótica del movimiento social y político Marcha Patriótica, se hizo un balance de lo alcanzado el pasado año y de las perspectivas de trabajo para el denominado año de la paz. VOZ habló con uno de sus voceros, David Flórez, quien marcó la importancia de la unidad, el proceso constituyente y las elecciones locales.

–¿Cuáles son las primeras conclusiones que arroja la Junta Patriótica, reunida la pasada semana?

–Se ratifican los tres grandes ejes de trabajo de Marcha Patriótica para el 2015: vamos a seguir en la búsqueda de un mayor respaldo a los diálogos de paz y en la consecución de la solución política al conflicto; y para ello, seguimos con nuestro trabajo de las Constituyentes por la Paz, con el impulso de una nueva movilización para el 9 de abril, y todas las iniciativas que busquen articular aun más a los sectores que asumen la bandera concreta de la solución política.

Como segundo eje de trabajo, tenemos el posicionamiento político de Marcha Patriótica, en la idea de que los planteamientos nuestros sean mayormente conocidos por el pueblo colombiano, así como las opiniones expresadas por nuestras organizaciones sociales y populares. Y un tercer eje es de tipo organizativo; Marcha Patriótica cuenta con un cuerpo de dirigentes con un liderazgo en comunidades campesinas, afros, estudiantiles, de mujeres, organizaciones políticas y defensores de derechos humanos que hacen parte de su Junta Patriota, a la que hay que reforzar más, así como los Consejos Patrióticos Departamentales.

Sin ser pretenciosos se ha podido organizar una buena estructura organizativa, pero aún falta mucho por hacer. Además quiero agregar que el 2015 será el año del segundo Consejo Patriótico Nacional, el más alto órgano de dirección de la Marcha Patriótica para el 19, 20 y 21 de julio, coincidiendo con fechas históricas y a cinco años de la primera marcha y cabildo abierto por la independencia que arribó a la Universidad Nacional.

–¿La unidad y las tareas electorales definidas harán parte del plan de trabajo para este nuevo año?

–Así es, al plan de trabajo del 2015 se le agregaron dos nuevos ejes. Por un lado, la unidad: estamos convencidos de que tenemos que jugar un papel más determinante en los sectores de izquierda y populares que confluyan en el buen desarrollo del Frente Amplio, de la Cumbre Agraria y en todas las iniciativas de unidad para ser alternativa de poder en el país.

Y por otro lado, el tema electoral: tenemos múltiples tareas de gran importancia como la conformación de nuestra Comisión Electoral Nacional y de Comisión de Ética, como un inicio para afrontar esa tarea. La escogencia de los candidatos y hacer la campaña en función de agitar la paz en procura del respaldo al proceso y la pedagogía de la Constituyente son retos de Marcha Patriótica, de los cuales esperamos múltiples victorias.

–Marcha Patriótica ha protagonizado movilizaciones por el proceso de paz. En el 2015, ¿cuál será el aporte de Marcha Patriótica en ese sentido?

–Hemos logrado que desde el mes de noviembre la iniciativa de movilización para el 9 de abril sea apropiada por el Frente Amplio y otras organizaciones políticas y sociales. En principio será similar a la movilización hecha hace dos años, cuando en aquel momento, el pueblo colombiano marchó por el respaldo al proceso de paz. En esta ocasión, las banderas de la movilización para Marcha Patriótica serán dos: el cese bilateral de fuegos que consideramos necesario pues el actual proceso no puede seguir bajo el hostigamiento militar que lo lleve a dinamitarlo; y el mecanismo de refrendación, que para nosotros es la Asamblea Nacional Constituyente.

–A propósito del tema de una Asamblea Constituyente, ¿cómo va el proceso constituyente a la cabeza de Marcha Patriótica?

–En ese proceso se ha avanzado bastante. Hace apenas dos años hablar de ese tema era, para muchos, una locura. Pero hoy importantes sectores vienen hablando de ello, incluso desde el mismo establecimiento. El papel de las Constituyentes por la Paz ha hecho que muchas bases campesinas y afros, entre otras, entiendan la importancia de una nueva constituyente y cuáles serían sus planteamientos para la misma. Entonces, el balance es positivo, pero creemos que nos hace falta mucha más pedagogía para el proceso de una Asamblea Nacional Constituyente de cara a la refrendación de los acuerdos y como mecanismo para reivindicar las peticiones históricas del movimiento social en Colombia, las cuales no caben en la actual Constitución.

–¿El Frente Amplio es otra de las tareas?

–Nosotros el pasado mes de noviembre oficialmente definimos como un eje central el tema del Frente Amplio por la Paz, en la necesidad de conformar un bloque alternativo. Y le apostamos a que ese sea un insumo importante para ello. Estamos en el Frente Amplio en todos los departamentos del país, convencidos que desde allí se genere un mejor ambiente al proceso de paz. En el Frente las fuerzas de izquierda han podido entregarle al país resultados de su trabajo como la verificación de la tregua unilateral de la guerrilla de las FARC; pero al tiempo, estamos en la construcción de una alternativa política: en ese sentido discutimos elementos programáticos, políticos y candidaturas unitarias que confluyan en programas de gobierno alternativo.

–Hablemos un poco sobre la verificación hecha por el Frente Amplio de la tregua unilateral indefinida decretada por las FARC. Ya hay un informe del primer mes cuyo resultado fue el cumplimiento absoluto por parte de la guerrilla, pero no así del gobierno.

–Hemos venido consolidando una red de veedores del Frente Amplio en la medida en que quienes conocen realmente las situaciones de conflicto son las comunidades y organizaciones sociales en escenarios de conflicto, porque son ellas las que viven bajo los ametrallamientos, los bombardeos. Con ellas hemos venido construyendo esa red de veedores que en la práctica son defensores del proceso de paz. Muchas organizaciones están tomando la iniciativa de ser veedores. Lo que reportan las comunidades es que el Ejército está aprovechándose para escalar la guerra.

La tropa oficial está ocupando zonas y territorios con mucho pie de fuerza casi en medio de las comunidades. Eso pone en riesgo el proceso de paz y la tregua unilateral porque es evidente que la guerrilla no se va dejar matar, y es la población civil la que paga las consecuencias. Es decir, un gesto de paz se está aprovechando para alimentar una posición de guerra y eso no es el mejor mensaje para el país. Esa actitud es decretar la muerte por la muerte que en el fondo es seguir con la consigna oficial de cincuenta años atrás: aún es posible derrotar a la insurgencia por la vía militar