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Después de once años, el Estado entrega los restos de cinco víctimas de la masacre del 16 de mayo de 1998
Agencia Prensa Rural / Lunes 26 de enero de 2009
 

Ricky Nelson García, Ender González, Oswaldo Enrique Vásquez, Óscar Leonel Barrera y Wilson Pacheco fueron despedidos en Barrancabermeja por amigos, allegados, familiares y organizaciones sociales. Los restos habían sido encontrados en septiembre de 2008 en una fosa común en la vereda Mata de Plátano, del municipio de Sabana de Torres, (Magdalena Medio santandereano).

Miembros de Asorvim en el III encuentro nacional de víctimas de crímenes de Estado. Foto: Prensa Rural.

El pasado 23 de enero, a las 5 de la mañana, las familias de las víctimas de los hechos del 16 de mayo de 1998 viajaron hacia la ciudad de Bucaramanga (Santander) para recibir los restos de cinco de sus familiares. Lo hicieron en compañía de diversas organizaciones sociales encabezadas por la Asociación Regional de Víctimas del Magdalena Medio (Asorvim). En las instalaciones del DAS se hizo la entrega de los restos óseos de cinco de las 25 personas que fueron desaparecidas y masacradas en la incursión paramilitar del 16 de mayo de 1998 en la Comuna 7 de Barrancabermeja.

El mismo día, se dio retorno al puerto petrolero, entre lágrimas y tristeza de los parientes. La comunidad en general esperaba ansiosamente en la cancha del barrio El Campín, lugar del que se llevaron a la mayoría de las víctimas. A la vigilia asistieron más de 300 personas de la comuna 7.

Al día siguiente, 24 de enero, en horas de la mañana se realizó una misa con las autoridades eclesiásticas. Terminada ésta se efectuó una caravana por toda Barrancabermeja hasta el cementerio Jardines del Silencio.

Ricky Nelson García, Ender González, Oswaldo Enrique Vásquez, Óscar Leonel Barrera y Wilson Pacheco fueron despedidos por amigos, allegados, familiares y las organizaciones sociales de la región. Todos ellos insisten en conocer la verdad de los hechos cometidos. Algunos familiares, en medio de su dolor, sostuvieron que esta masacre fue cometida con la complicidad de las Fuerzas Militares, y exigieron castigo para los autores intelectuales de los hechos.

Los familiares de los otros veinte desaparecidos el 16 de mayo esperan con angustia los restos de sus seres queridos, y piden al gobierno nacional que se esclarezca lo más rápido posible la verdad de los hechos, porque no quieren seguir más con esta tortura de no saber dónde están los restos de los demás desaparecidos. Como víctimas, seguirán luchando y reclamando sus derechos a la verdad, a la justicia y a la reparación integral.

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