Asociación Campesina del Valle del Río Cimitarra
:: Magdalena Medio, Colombia ::
Mapa del sitio
Suscríbete a servicioprensarural

Desplazamiento forzado en el sur de Bolívar por enfrentamientos entre Ejército y ELN
Dos de los refugiados fueron asesinados por los paramilitares que operan abiertamente en San Pablo
 

Desde el viernes 8 hasta el domingo 10 de mayo en las veredas Bajo Sicué y Alto Sicué, pertenecientes al municipio de San Pablo (Sur de Bolívar), se presentaron fuertes enfrentamientos entre el Batallón Nueva Granada del Ejército Nacional y guerrilleros del ELN, causando el desplazamiento de 70 campesinos que viven y trabajan estas tierras, quienes salieron a la cabecera de San Pablo. Dos de ellos habrían sido asesinados por paramilitares asentados en el casco urbano. La mitad de los desplazados son niños que no superan los ocho años, aseguró David Caro, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda Alto Sicué.

Según denunciaron las familias que llegaron a las 11:00 p.m. del viernes hasta el casco urbano de San Pablo, el pánico se generó cuando, presuntamente, algunos militares disparaban y recibían fuego desde viviendas ubicadas en las zonas rurales. “Según me contó la gente, los civiles vivieron un momento crítico cuando los militares se atrincheraron. Tener a un militar disparando al lado de las personas causa mucho pánico”, comentó el líder comunal.

Conforme con testigos, los militares que se desplazaban por el valle fueron blanco de los disparos hechos desde las montañas por los guerrilleros.

Una comisión de acompañamiento compuesta por el Programa de Desarrollo y Paz del Magdalena Medio, la Defensoría del Pueblo y el Servicio Jesuita a los Refugiados, se desplazó el sábado 9 de mayo hasta la zona para evaluar la situación.

En declaraciones a los medios, el coronel Mauricio José Zabala Cardona, comandante del Batallón Antiaéreo Nueva Granada, dijo: “Se dispararon cohetes precisos, no bombardeos indiscriminados. Es falso que nos hayamos atrincherado entre la población civil. Por el contrario, los combates se dieron en área abierta”.

Las comunidades temen por sus vidas, ya que quedan en medio del fuego cruzado entre Ejército y la guerrilla del ELN, infringiendo el derecho internacional humanitario. Las familias desplazadas por los combates siguen en el casco urbano de San Pablo, a la espera de soluciones.

Hacemos un llamado al sistema de alertas tempranas de la Defensoría del Pueblo para que esté pendiente de la situación de la población campesina del Sur de Bolívar, y al Gobierno Nacional para que preste ayuda humanitaria a estas familias desplazadas en la cabecera de San Pablo y persiga a los paramilitares, quienes operan públicamente, encapuchados y con armas largas, en un retén que instalan en el sitio Quiebrapatas, en la salida del pueblo hacia la parte alta, donde suelen robar a los campesinos.