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Zozobra en el puerto petrolero
Tiroteo deja cinco heridos en el barrio Arenal de Barrancabermeja
Luz Bejarano / Sábado 11 de agosto de 2007
 

El pasado jueves 9 de agosto, a las 8:30 de la noche, los habitantes del barrio Arenal disfrutaban del partido final de un campeonato de microfútbol. Todo trascurría en normalidad, hasta que dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta de alto cilindraje irrumpieron en el lugar, afectando la tranquilidad de la comunidad y disparando en repetidas ocasiones a la multitud que se encontraba en la cancha polideportiva. El hecho dejó cinco personas heridas gravemente -dos menores y tres adultos-. Dos de los heridos se encuentran delicados de salud: Justiniano Cárdenas de 20 años, a quien una bala le perforó un pulmón, y un niño de ocho años que recibió un tiro en el estomago. La comunidad barranqueña rechazó este acto de violencia que nuevamente deja a la población civil como blanco.

Las primeras versiones sobre el incidente adjudican el tiroteo a que al parecer miembros de las AUC pretendían asesinar a un ex miembro de esa organización paramilitar vinculado al cartel de la gasolina, fallando en su acción.

En Barrancabermeja, desde hace varios días se vienen cometiendo amenazas y asesinatos por parte de los grupos paramilitares que supuestamente están desmovilizados y que ahora se denominan "Águilas Negras", quienes en días recientes declararon objetivo militar a varias organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles del Magdalena Medio.

Frente a esta situación, el alcalde de la ciudad, Edgar Cote, dice que no pasa nada, que todo está bien, que ya no hay paramilitares y que Barrancabermeja es "la tierra prometida". Pero la realidad es que las calles siguen bañadas de sangre de hombres y mujeres inocentes. ¿Qué pasa con los militares y policías que a diario recorren las calles de la ciudad?

El gobierno de Álvaro Uribe dice por los diferentes medios de comunicación que los grupos paramilitares se desmovilizaron, pero en la práctica lo que se dio fue un cambio de nombre para seguir operando y mantener el terror que generan en la ciudad y la región.