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"Al alba": Luis Fernando Aute
Luis Fernando Aute / Jueves 29 de diciembre de 2011
 

Si te dijera amor mío

que temo a la madrugada

no sé que estrellas son esas

que hieren como amenazas

ni sé que sangra la luna

al filo de su guadaña

Presiento que tras la noche

vendrá la noche más larga

quiero que no me abandones

amor mío al alba

al alba, al alba

al alba, al alba...

Los hijos que no tuvimos

se esconden en las cloacas

comen las ultimas flores

parece que adivinaran

que el día que se avecina

viene con hambre atrasada

Presiento que tras la noche...

Miles de buitres callados

van extendiendo sus alas

no te destroza amor mío

esta silenciosa danza.

maldito baile de muertos

pólvora de la mañana.

Presiento que tras la noche...

Entrevista publicada el 4-11-00 en La Vanguardia ( periódico derechista catalán ):

—En septiembre de 1975 se ejecutan las últimas penas de muerte en España. Fusilan a cinco terroristas y usted compone una bella canción que titula "Al alba".

— Escribí "Al alba" los días previos a los fusilamientos y con mucha urgencia. Debe haber sido una de las canciones que más rápidamente me surgieron, pero quería que la gente la cantara. La verdad es que no tuve que pensar mucho, salió del dolor.

—Es un canto a la vida pero enmascarado en una canción de amor. ¿Por qué la concibe de ese modo?

— Quería que pasara rápido la censura. Por eso la estructuré como una canción de amor, de despedida para siempre y como un alegato a la muerte. Pero hay dos elementos en la canción muy vinculados a las ejecuciones. Una vez pasó la censura, Rosa León la grabó.

—Seguramente es una de las canciones más reclamadas por su público. ¿Por qué cree que se la piden?

— Estas canciones que salen ya hechas, de la propia necesidad de escribirlas, calan más. Sí, probablemente es la que más he cantado.

—Creo que enviaba a los censores muchas canciones que sabía ya que no serían aceptadas y así, por pena, aprobaban las que usted quería.

— No creo que les inspirara ninguna pena. Pero sí fue una treta que utilizábamos muchos para que se salvaran algunas letras.