Agencia Prensa Rural
Mapa del sitio
Suscríbete a servicioprensarural

Elecciones en Venezuela 2012: Avanzar hacia el futuro o regresar al pasado
César Jerez / Sábado 6 de octubre de 2012
 

Fundador y redactor de la Agencia Prensa Rural. Geólogo de la Academia Estatal Azerbaijana de Petróleos (exURSS). En Bakú obtuvo una maestría en geología industrial de petróleo y gas. Es profesor y traductor de idioma ruso. Realizó estudios de gestión y planificacion del desarrollo urbano y regional en la Escuela Superior de Administración Pública -ESAP de Bogotá. Desde 1998 es miembro de la ACVC. Actualmente coordina el equipo nacional dinamizador de Anzorc. Investiga y escribe para diversos medios de comunicación alternativa.

Temas relacionados

Estoy en Caracas, en la sede de Catia TV, un canal comunitario de las barriadas que circundan el palacio presidencial de Miraflores, barrios de la pobresía que mañana, a partir del toque de Diana de las tres de la madrugada, empezarán a bajar de las ladera en busca de los puestos de votación, su voto será unánime, por Chávez.

En Catia TV se reúnen algunos medios alternativos latinoamericanos, para hacer un cubrimiento especial de la jornada electoral venezolana, convocados por Alba TV. La idea es contrarrestar la intoxicación informativa que ya se ha desplegado desde grandes medios latinoamericanos de información: “empate técnico, ganó Capriles, a medio día se sabrá quien ganó o habrá fraude”, son las versiones de la matriz de opinión prefabricada, que busca deslegitimar el eventual triunfo de Chávez.

Llegué hasta acá esta mañana, después de un lento viaje por tierra. Al dejar atrás Cúcuta, la frontera viva ya estaba llena de gente, ruidos y trasteos para lado y lado, eran las 7 de la mañana. En San Antonio ya tuve que afrontar el primer retraso largo en el trayecto. Migración venezolana dispuso de un solo y lento funcionario para sellar los pasaportes de los centenares de viajeros de esa hora. El escenario de la corrupción estaba servido. La larga cola de medio día se podía obviar con el pago ilegal de cien bolívares. Para no patrocinar el cartel de la corrupción fronteriza decidí esperar pacientemente. Un argentino de origen italiano en la cola me llamó la atención, se había demorado 9 meses para llegar hasta San Antonio, venía en Bicicleta desde su natal Rosario, entraba a Venezuela, para darle la vuelta al Lago de Maracaibo, reingresar a Colombia por la Guajira, ir hasta Turbo, pasar a Panamá en barco, con destino final México. Todo un viaje a punta de pedal que le tomará por lo menos otros seis meses. Se llama Javier D’Esposito, no tiene un solo gramo de grasa y toda una decisión impresionante para tragar kilómetros a pulmón. Conocerlo me motivó a cumplir al menos uno de mis sueños bicicleteros y me pareció un buen augurio, en este mi primer cubrimiento electoral. Su proeza la pueden seguir aquí: Desde el sur en bicicleta.

En Caracas llegué a buscar a Pablo Kunich, finalmente lo ubiqué en su casa de La Pastora, en el centro de la ciudad, una azotea y una especie de comuna de jóvenes comunicadores alternativos y activistas políticos de Latinoamérica.

El centro de Caracas vive un calma festiva, la calma a veces es interrumpida por uno que otro grito desde los carros: “viva Chávez”. La esquina caliente de la plaza de Bolívar, como lo es habitualmente, esta llena de fervientes chavistas, como siempre los compradores de dólares ofrecen buen cambio y los predicadores la redención eterna. Simón sobre su caballo, lo sigue observando todo, pocos extranjeros, lo inunda todo solo el tiempo fresco que corre lentamente hacia el desenlace del proceso electoral.

Todo está listo para las elecciones, a primera hora de la tarde de este viernes se supo que ya estaban instaladas, casi en su totalidad, las 39.018 mesas de votación electrónica, puestas a disposición de los más de 18 millones de votantes, que escogerán a un nuevo Presidente de la República Bolivariana de Venezuela o reeligirán a Chávez. El que resulte electo habrá de asumir el 10 de enero de 2013, por un período de seis años.

Desde la frontera he sentido el fervor de los venezolanos en esta contienda electoral, la oposición presenta por primera vez un candidato unificado, un burgués con poco carisma y el mismo paquete neoliberal de la mayoría de las oligarquías latinoamericanas, como propuesta. Chávez se presenta resucitado del cáncer y con la promesa de dar continuidad a sus indiscutibles programas sociales, superar los errores, avanzar en la construcción de un nuevo modelo y en el proceso de integración latinoamericana.

Por todo lo anterior y por el nivel de polarización se estima que habrá un récord de votantes y que la abstención se reducirá drásticamente; en Venezuela, pese a que el voto es obligatorio, siempre hubo un alto porcentaje de abstención que se ubicó en el 22% en las últimas elecciones.

El padrón electoral del país es de 18’802.648 venezolanos que tendrán a su disposición 13.863 centros de votación, a los que se agregan los 127 centros que fueron ubicados en el exterior y que atenderán a más de 100.400 venezolanos que se inscribieron ante el Registro Electoral.

En Venezuela el proceso electoral está, desde hace cuatro años, totalmente automatizado y hasta en el más lejano caserio, sin importar el número de electores, hay una mesa automática de votación. La transparencia está garantizada, lo ha admitido hasta el Centro Carter, acá no votan los muertos, no existe el trasteo de votos, los paramilitares no imponen un candidato en las regiones y la gente ya no tiene la necesidad de que le paguen el voto.

Avanzar hacia el futuro o regresar al pasado

Dos proyectos políticos, antagonistas en extremo, serán los modelos por los que el electorado venezolano sufragará para elegir este domingo al Presidente de la República: uno, el que gobierna en la actualidad y que ha venido avanzando en el “socialismo del siglo XXI”, con el analfabetismo erradicado, acceso gratuito a la salud y la educación, más seguridad alimentaria, más redistribución de la renta petrolera y por ende más acceso a los derechos económicos y sociales, con un modelo de desarrollo económico y social controlado por el Estado.

Hugo Chávez propone dar un salto adelante con la Ley contra el monopolio, que tendría un escenario político favorable, y las leyes del poder comunal que facilitarían la transferencia del poder regional a las comunas, así como el impulso a distintos mecanismos de organización empresarial, especialmente a empresas familiares y cooperativas comunitarias. No desmontará del sistema cambiario que seguirá ejerciendo control sobre las divisas y se mantendrán los subsidios a la gasolina, la electricidad y el transporte público.

Con Chávez en el poder seguirá la guerra al latifundio, para lograr la soberanía alimentaria, el que ha sido uno de los grandes retos de su gobierno, pues Venezuela está todavía muy lejos de autoabastecerse. Habrá una consolidación de las misiones como instrumento de la revolución bolivariana, pues para Chávez esa es la manera de profundizar en la construcción de la justicia social. Deberá Chávez todavía superar los problemas de corrupción estructural, la delincuencia urbana, la crisis carcelaria, consolidar la misión vivienda, recampenizar a Venezuela y terminar de apoyar el proceso de paz colombiano, para darle mayor estabilidad a la región e impulso a la integración.

Las tesis programáticas del candidato opositor, Henrique Capriles Radonski, son “más sencillas”, apuntan hacia el regreso a una economía impuesta por el mercado en el marco de un paquetazo neoliberal y a lo que él ha denominado como “la restitución en Venezuela del Estado de Derecho”, según la oposición, diezmado en los últimos años. Se trata del mismo modelo que sumió en la pobreza al pueblo venezolano.

El proceso progresista venezolano tiene la oportunidad de avanzar durante otros seis años con las reglas de juego de la democracia burguesa liberal, con elecciones. Mañana hacia la medianoche se sabrá. Pero no es mucha la incertidumbre, todas las encuestas dan un promedio de 12 puntos de ventaja a Chávez. Pero más allá de las encuestas, está la gente del común que ha empezado a dejar la pobreza gracias a sus programas, ellos son todavía la mayoría del país y se ven a simple vista en pueblos y ciudades, además Chávez popularizó las elecciones y les imprimió mayor transparencia, ha realizado 16 elecciones en 14 años. Los alfabetizados y escolarizados venezolanos tienen un mayor nivel de conciencia, factor importante a la hora de elegir. Así que no es como dice la oposición, que “la suerte está hechada” en estas elecciones, esto no es una lotería, acá existe un proceso social, real, evidente, que mañana tendrá toda la opción de continuar.