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¿Quién le pone el cascabel a Víctor Carranza?
Horacio Duque Giraldo / Viernes 28 de diciembre de 2012
 

1. Es la pregunta que muchos nos hacemos respecto del poderoso señor de las esmeraldas, dueño del 40% del comercio mundial de las piedras verdes. Propietario de más de un millón de hectáreas en el Meta, Cesar, Bolívar, Cundinamarca, el Valle y Quindío. En este último departamento, declarado por la Unesco patrimonio cultural de la humanidad, ha comprado cientos de hectáreas, en sociedad con un poderoso narco de la región, en las zona aledaña, curiosamente, a la Octava Brigada del Ejército.

2. La Fiscalía y otras autoridades judiciales, nacionales y extranjeras, tienen infinidad de pruebas que demuestran su participación directa en la conformación y operaciones de grupos paramilitares sangrientos. Los últimos datos los reporta el Departamento de Justicia de los Estados Unidos e indican que es el autor, junto con militares activos, de la masacre de más de 25 personas en el municipio de Miraflores, departamento del Guaviare, en el año de 1997.

3. Los paramilitares recluidos en las cárceles nacionales por cuenta de varios procesos que adelanta la Unidad de Justicia y Paz, han aportado muchos datos sobre su participación, con el alias de Clodomiro Agamez, en la conformación y operación de ejércitos privados en el occidente de Boyacá, Puerto López, Puerto Gaitán, el Vichada, en Villavicencio, el Cesar y otras áreas de la geografía nacional, donde ocurrieron centenares de masacres, asesinatos y desapariciones de campesinos, líderes agrarios y dirigentes de la Unión Patriótica.

4. Su prominente posición económica y violenta ha servido de soporte a una frecuente participación política. Destacados políticos lo han cortejado con gusto y en el periodo del señor Uribe Vélez se le veía en las cumbres del caudillo a propósito de los Consejos Comunitarios utilizados en la campaña populista de la Seguridad Democrática. Santos, el actual dueño de la Casa de Nariño, ha sido muy condescendiente con dicho seudo empresario asesino, hasta llegar a participar en reuniones y encuentros que registraron su presencia (la del capo) en Chiquinquirá y otros municipios esmeralderos de Boyacá, donde han sido realizadas reuniones de supuesta pacificación.

5. Su poder es de tales proporciones que en las dos veces que ha sido capturado (1988 y 1995), logró la libertad mediante argucias procesales de sus abogados, diestros en la compra de funcionarios judiciales. Cuando ha ocurrido su retención, encumbrados personajes (no muy santos) han mediado para demandar su inocencia y libertad.

6. Su influencia es de tales proporciones que las causas en los tribunales españoles por narcotráfico, seguidos en su contra, han sido tan bien refundidas para llevar tranquilidad a la deteriorada condición del envejecido patrón boyacense.

7. Hay informaciones recientes, de las últimas horas, que indican contundentes evidencias de su implicación en crímenes con masacres y asesinatos de campesinos, ¿Será que ahora si procederán las autoridades judiciales, con celeridad y eficacia, para que llegue el castigo justo o de nuevo se impondrán las argucias y presiones judiciales para que todo quede en la impunidad?. Eso es muy posible.

8. ¿Quién le pone el cascabel judicial a Víctor Carranza? es la pregunta que nos hacemos a propósito de este capítulo siniestro de la historia nacional con cientos de víctimas, todos ellos ciudadanos humildes que perecieron reclamando sus derechos sociales y políticos.

9. Difícil alcanzar la paz si la impunidad prevalece por la ineficacia, corrupción y mediocridad en la justicia nacional, que solo opera para los de ruana, campesinos y trabajadores inocentes, que permanecen por años en las cárceles y penitenciarias porque los funcionarios de la rama no administran sus funciones con equidad y ética.

En la foto el zar de las esmeraldas Víctor Carranza en compañía de de los obispos Héctor Gutiérrez Pabón y Luis Felipe Giraldo.