La lucha que adelantan los grupos armados ilegales por el territorio ha desplazado en las últimas semanas a cerca de 600 personas en Alto y Medio Baudó, Chocó.
El pasado 13 de agosto comenzó el éxodo de un numeroso grupo de indígenas de la etnia embera que vivían en la comunidad Iruto, perteneciente al resguardo Catrú, a orillas del río Dubaza, zona rural del municipio de Alto Baudó (Chocó).
El desplazamiento se dio unos días después de que hombres el grupo ilegal ‘Los Rastrojos’ llegaron a esa comunidad y, tras saquear las casas de sus habitantes y robar sus animales, les advirtieron que si quería quedarse allí debería colaborar con ellos. Esta amenaza hizo que el grupo de indígenas huyera en pequeñas embarcaciones hacia la comunidad Nuncidó y un día después a la vereda La Playita, en donde permanecen hasta hoy.