El año pasado fueron erradicadas 220 mil hectáreas de cultivos ilícitos en el país. Hay 877 reclamos en trámite ante Policía y Estupefacientes.
Ese es el valor reclamado por 101 familias campesinas que demostraron que sus cultivos legales fueron afectados en medio de las aspersiones contra los sembrados de coca en el país desde el 2001.
Aunque la gran mayoría de las quejas no prospera, un informe oficial de la Dirección de Estupefacientes conocido por El Tiempo revela que a la par del incremento de las fumigaciones se ha dado un aumento en el número de reclamos por supuestos daños.
La mayoría de ’reparaciones’ se han entregado a campesinos de Caquetá, Putumayo, Antioquia, Nariño y Arauca, donde la ofensiva contra el narcotráfico ha sido más fuerte en los últimos años.